CREACIÓN DEL ESPACIO EUROPEO DE EDUCACIÓN SUPERIOR (EEES). EL PROCESO DE BOLONIA.


La declaración de Bolonia, firmada por 29 países europeos el 19 de Junio de 1999 para su implantación en 2010, sentó las bases de un proceso europeo de concreción de un único espacio educativo y académico. Conscientes del contexto actual y de la importancia de la educación para el desarrollo y fortalecimiento de sociedades estables, pacíficas y democráticas, se planteo la necesidad de “establecer una Europa más completa y de mayor alcance construida, mediante el desarrollo y fortalecimiento de sus dimensiones intelectual, cultural, social, científica y tecnológica.” (Declaración de Bolonia 1999)[1]

La búsqueda de construir la Europa del Conocimiento supone un componente indispensable “(…) capaz de dar a sus ciudadanos las competencias necesarias para afrontar los retos del nuevo milenio, junto con una conciencia de compartición de valores y pertenencia a un espacio social y cultural común” (Ibidem)

Las diversas instituciones de educación europeas adquieren entonces, un papel principal en la construcción del área Europeo de Educación Superior, lo cual asegura “que los sistemas de educación superior e investigación se adapten continuamente a las necesidades cambiantes, las demandas de la sociedad y los avances en el conocimiento científico.” (Ibidem)

Camilla Mileto[2] analiza que dicho proceso se inicio con la redacción de la “Carta Magna de las Universidades Europeas” por los Ministros representantes de Francia, Alemania, Italia y Reino Unido en Bolonia en 1988, donde se establecieron los principios generales del papel de las universidades en el desarrollo cultural, científico y técnico de una sociedad en constante proceso de transformación. Posteriormente en sucesivos encuentros estos principios comenzaron a concretarse con más firmeza y a incorporar, encuentro a encuentro, mayor cantidad de países adherentes.
La construcción del Espacio Europeo de Educación Superior se inicia con la Declaración de Sorbona en mayo de 1998, donde se plantea la armonización del diseño del Sistema de Educación Superior Europeo, involucrando los países de Francia, Alemania, Italia y Reino Unido. Se consolida y amplia en la Declaración de Bolonia (1999), en la que los ministros europeos de educación instan a los estados de la Unión Europea (UE) ha implantar una serie de actuaciones. Ya en 2010, luego de una serie significativa de encuentros, en la reunión en Budapest-Viena son 47 los países participantes, lo cual demuestra la gran adhesión y compromiso de casi toda la UE.[3]

En primer lugar, la declaración de Bolonia, planteó la necesidad de dar forma a esta Europa de los Conocimientos, reconociendo el papel imprescindible de las universidades en este proceso y segundo, definió una serie de criterios generales y básicos del proceso que se desarrollo sucesivamente, en los múltiples encuentros (MILETO, 2012):
·                        Adopción de un sistema de titulaciones fácilmente comprensible y comparable, para promover la obtención de empleo y la competitividad internacional del sistema educativo superior, mediante la introducción de un suplemento europeo al título.

·                        La adopción de un sistema de titulaciones basado en dos ciclos fundamentales, diplomatura (pregrado), y licenciatura (grado) con perfiles académicos que se acoplen a las necesidades del mercado laboral. Las titulaciones de primer grado, pensadas para el mercado de trabajo europeo, darán acceso a las de segundo grado, y las de segundo grado, orientadas a los estudios de máster y/o doctorado.

·                        La organización del sistema a través de ECTS (Sistema de Transferencia de Crédito Europeo), implementando un mismo sistema de valoración de materias por créditos, lo cual posibilita las movilidades estudiantiles. Los créditos también pueden conseguirse fuera de las instituciones educativas superiores.

·                        El fomento y la promoción de la movilidad de los estudiantes, profesores, personal de la universidad, promocionando el acceso a oportunidades de estudio y formación para estudiantes y la valoración de estancias de investigación  para profesores, investigadores y personal de administración.

·                        Impulsar la cooperación europea para garantizar la calidad y para desarrollar unos criterios y unas metodologías educativas comparables.

·                        Promover la dimensión europea de la educación superior y el desarrollo curricular, la cooperación institucional, esquemas de movilidad y programas integrados de estudios, de formación y de investigación.

Bolonia propuso una gran reforma de la enseñanza universitaria, un proyecto de una universidad interregional común que alberga un cambio paradigmático de las metodologías educativas, puesto definitivamente en marcha durante el año 2010, en Budapest-Viena con 47 países firmantes.
Posteriormente, se introducen algunos aspectos y diversos  objetivos que se van perfilando en las declaraciones sucesivas (MILETO, 2012):

GARANTIA DE CALIDAD: promoción de la cooperación europea en la garantía de calidad para garantizar los estándares de alta calidad que faciliten la comparabilidad de las calificaciones europeas. En 2003, en la declaración de Berlín,  se propone un sistema de agencias de calidad para la evaluación de programas e instituciones sobre la base de unos criterios comunes coordinados por la Red Europea de Garantía de Calidad en la Educación Superior, entre ellas la Agencia Valenciana D´Avaluació I Prospectiva.

ESTRUCTURA DE CARRERA: dos ciclos con objetivos diferentes y bien definidos y con perfiles académicos que se acoplen a las necesidades del mercado laboral. Desde la declaración de Lisboa, 1997, cada estudiante tendrá su título académico acompañado por el documento del Suplemento al Diploma. Se trata de un documento de información unificado, personalizado para cada titulado universitario que recoge todos los datos necesarios sobre los estudios cursados, el contexto nacional, las competencias y capacidades profesionales adquiridas

APRENDIZAJE DURANTE TODA LA VIDA: supone el elemento fundamental del EEES para “encarar los desafíos de la competitividad y el uso de nuevas tecnologías, y para mejorar la cohesión social, la igualdad de oportunidades y la calidad de vida. (Praga, 2001)”

INTEGRACIÓN ENTRE EDUCACIÓN SUPERIOR E INVESTIGACIÓN: supone la vinculación entre el sistema educativo universitario y la investigación para asegurar el desarrollo y la consolidación de la denominada “Europa de los Conocimientos”. Se fomentan la formación interdisciplinaria a través de estudios de doctorado y postdoctorado, y el desarrollo de competencias transferibles que permitan alcanzar la competitividad requerida por los profesionales en la realidad actual y la excelencia de los estudios europeos.

El proyecto de una universidad europea común implica la voluntad de trabajar juntos en la creación y transmisión de los conocimientos en una especie de red de instituciones europeas.
El cambio de paradigma educativo busca remplazar una educación  excesivamente teórica, por una educación activa, práctica, innovativa, adaptada al uso de las nuevas tecnologías y modalidades sociales que el SXXI impone.
Así se pondera el proceso del alumnado, un nuevo paradigma donde el aprendizaje no acaba nunca, y donde es función de la universidad otorgar al futuro profesional de las competencias que la sociedad posteriormente le requerirá.
“No se trata tanto de qué se enseña como de qué aprende el alumnado. Este cambio de punto de vista conlleva que, aunque los conocimientos siguen siendo imprescindibles y son la finalidad última de los estudios, se tenga en cuenta no sólo el aprendizaje de contenidos, sino también, y de forma muy importante, las capacidades y destrezas que el alumnado deberá trabajar paralelamente. Al nuevo profesional, la sociedad no sólo le reclamará unos conocimientos, sino que deberá ser competente según el perfil que habrá adquirido, fruto de haber cursado una titulación universitaria específica” (Agència per la Qualitat del Sistema Universitari de Catalunya, 2009)
Ello implica un cambio de concepción pedagógica, pasando de un modelo de enseñanza- aprendizaje enfocado en la enseñanza, hacia un modelo enfocado en el aprendizaje, basado en el trabajo del estudiante y en el establecimiento de las condiciones idóneas a fin de que se pueda conseguir y dominar con éxito los objetivos propuestos.

La tradición de la Europa universitaria estuvo marcada por modelos organizativos dispares, con ofertas académicas individuales nacionales, la formación universitaria se caracterizó por ser demasiado teórica, poco práctica, con énfasis en lo que dice el profesor y menos en la iniciativa autónoma de los estudiantes y de su trabajo en grupo.
El proceso Bolonia es la oportunidad para plantearse una reflexión profunda sobre el sistema educativo, una reflexión regional, impulsada por objetivos comunes, en vías concretas de ejecución.
En el seno de las escuelas la respuesta ha tenido éxito, pese a la resistencia de algunos estamentos que ven desestabilizadas sus costumbres y estructuras de clases, horarios, apuntes, etc. Esto implica necesariamente un cambio de mentalidad, y una apertura al cambio, una preocupación por impartir más y mejor educación, por no cosificar y adaptar, movilizar.
Esto claramente se evidencia en la multiplicidad de escritos, redes, congresos, publicaciones, artículos, grupos de estudio e innovación, etc. que los profesores universitarios europeos se encuentran desarrollando en este camino hacia la innovación educativa. 







[1] Declaración de Bolonia. Declaración conjunta de Ministros de Educación. 19 de Junio de 1999. Extraído de página web: http://www.queesbolonia.gob.es/
[2] Camilla Mileto es Profesora titular de Universidad del Departamento de Composición Arquitectónica. Profesora del Máster Oficial en Conservación del Patrimonio Arquitectónico. Subdirectora Docente del Departamento de Composición Arquitectónica. Subdirectora del Instituto de restauración del Patrimonio, entre otros cargos.
[3]  “Los encuentro se produjeron en: París, 1998; Bolonia 1999; Praga 2001; Berlín, 2003; Bergen, 2005; Londres, 2007; Lovaina, 2009; Budapest-Viena, 2010. Sus respectivas declaraciones se pueden encontrar fácilmente en internet, en diversas páginas.” Extraído de MILETO, Camilla. Bolonia: qué es y en qué nos afecta. En Composición Innova. Innovación y mejora educativa en el área de Composición Arquitectónica. Departamento de Composición Arquitectónica. Universidad Politécnica de Valencia. Editorial Universidad Politécnica de Valencia, Valencia, 2012.